Los cristianos han de ser discípulos para hacer discípulos y los pastores han de ser formadores. Una visión que transformará la iglesia: discípulos que hacen discípulos.Lo que Col y Tony describen aquí es precisamente lo que por años he tratado de hacer en mi propia vida y en nuestra congregación. Según este libro, los cristianos deben ser discípulos que hagan discípulos, y la misión de los pastores es prepararlos para lograrlo. ¡Magnífico! Entre los libros que he leído, éste es el que más nos dirige hacia la verdadera naturaleza del ministerio pastoral. Mark Dever, Pastor Principal de la Iglesia Bautista Capitol Hill, en Washington D.C., Estados Unidos.Este libro tiene la habilidad de comprender las confusiones por las que pasa todo pastor cuando olvida el objetivo central que Jesús tenía para el ministerio, en resumen: hacer discípulos que hacen discípulos. Pero no deja al pastor en su nube de desesperación, el libro le entrega el coraje para comenzar a confiar en la estrategia de su maestro nuevamente. Y, ¡cómo no va a animarlo sisu estrategia le permitió alcanzar a países tan lejanos como el mío!Cristobal Cerón, Coordinador general de Entrenamiento Ministerial «Gimnasio» en Chile.«El enrejado y la vid es un libro peligroso de leer. Destruye preciados y amados ídolos, como los siguientes: «Si tenemos la visión y la misión adecuadas, la gente vendrási tenemos buenas vibras, se acercarán a nosotros con tener un buen grupo musical con un buen lugar de reunión». El enrejado y la vid, le recuerda a la iglesia que Jesús dice exactamente lo contrario. Jesús nos dice que hemos de ser buenos comisionarios y que debemos ir y «hacer discípulos de todas las naciones». El enrejado y la vid es el mejor libro que he leído respecto a movilizar a todos los cristianos para que sean buenos comisionarios. Hará que los que buscan la iglesia ideal se conviertan en siervos; los consumidores, en productores; y los discípulos, en hacedores de discípulos» Ben Pfahlert, Director del Ministry Traininin Strategy (Sistema de entrenamiento ministerial), en Sidney, Australia.